top of page

Mamá por su parte no paraba de engordar y engordar y casi ya no podía cogerme, pues como veréis por aquel entonces estaba aún bastante gordito. Y por fin mi hermana que también tenía prisa por salir se adelanto y el 16 de Mayo del 2005 vino a este mundo con tanta prisa que a mis padres no les dio tiempo más que de dejarme con mis abuelos paternos en su casa para poder ingresar también de urgencia en la clínica. Pasé nuevamente cuatro días apartado de mis padres, pues mi hermana que también nació por cesarea al ser prematura precisó de incubadora durante unos días. La realizaron todo tipo de pruebas para comprobar que estuviese en perfecto estado y ya lo creo que lo estaba.

Cuatro días después de aquello, mis abuelos me llevaron a la clínica para conocerla. La idea no me gustó mucho, estaba enfadado con ellos y no dude ni por un momento hacérselo saber. No paré de llorar hasta que conseguí de nuevo ser  el centro de todas las miradas de mis padres.

Aquella cosa peluda y sin pestañas que mi padre con tanto cariño me enseñaba era mi hermana. Era pequeñísima y ahora también competía conmigo con sus llantos captando toda su atención. En poco tiempo aprendí a compartir con ella a los dos y comenzaba a ser divertido, compartíamos baño y masajes, viajes en familia, y ahora me sentía más acompañado. Mis padres estaban más contentos y las risas volvieron a casa, también el caos y el agotamiento físico que suponía atendernos a los dos.

Un motivo para Unirnos

bottom of page